Parece broma, pero no…, con shower beer ya puedes beberte una cerveza fresquita mientras te enjabonas o te lavas el pelo en la ducha. Una cerveza especial que hará las delicias de los amantes a la bebida fermentada.
En la bañera se puede hacer todo, incluso muchas parejas se dan el gustazo de darse baños de espuma, como en las películas de Hollywood, a la luz de una vela crepitante, unas copitas de champán y unas fresas con nata, pero para el resto de mortales, nos toca mojarnos los labios con el agua que sale de la alcachofa.
Sin embargo, si eres un amante cervecero, entonces esta nueva idea te va a encantar y podrás disfrutar de buena cerveza fría en la ducha, bienvenidos al club. No es el típico invento de ir a bañarte con una lata de Mahou o un botellín de Cruzcampo en la mano; Shower beer va más allá: «Never show surprise, never lose your cool»
Ya había cerebros pensando, maquinando la idea. Afortunadamente, hay personas en este mundo que buscan soluciones a dificultades cotidianas y realmente hicieron algo para arreglar el problema. Creadores de soportes cerveciles que podrían ayudar y hacer la vida más fácil pero Shower Beer es otra cosa.
Shower Beer, bebe una cerveza mientras te duchas
Este oro líquido va envasado en botellas de 18cl, un tamaño idóneo para beberte la cerveza en tres o cuatro tragos, contiene 10% de alcohol y está fabricada con un cristal doble que evita que se rompa con facilidad, además de que mantiene mejor la temperatura fría de la cerveza. Los fundadores de Shower Beer han autoproclamado esta cerveza como la primera para beber en la ducha. Los genios de tan sensacional creación son la agencia sueca Snask y la cervecera Pangpang Brewery, una colaboración que, a priori, parecía más una estrategia de marketing pero que ya ha conseguido vender toda su primera partida producida y la segunda remesa de Shower Beer ya está produciéndose y pronto de nuevo a la venta.
Para Fredrik Öst, fundador y director creativo de Snasks, el sabor de #showerbeer está pensando para la experiencia bajo el agua. “Al dejar que la cerveza se asiente más tiempo en la primera fermentación, antes del secado y enfriado, se ha conseguido un sabor jabonoso que en algunas cervezas se llamaría ‘off’, pero que aquí le da un punto«.
Una idea y un producto que viene como anillo al dedo para empezar bien la noche del sábado antes de salir de fiesta. Si ya, además, le unes que puedes combinarlos con los productos de belleza y cosméticos Carlsberg, que sacó a la luz la marca de cerveza el año pasado, ya puedes montarte un botellón sin salir del baño.